Institución , la enciclopedia libre

Una institución es una organización establecida o fundada para desempeñar una función de interés público.[1]​ Instituciones son tanto las principales agrupaciones que vertebran la vida social como cualquier otra organización o corporación pública o privada creada para desempeñar determinada labor económica, política, social, educativa, cultural, científica, etc. (familia, Estado, iglesia, escuela, partido político, club deportivo, sindicato, empresa, etc.)[2][3][4][5]

Definición

[editar]

Existen diversas definiciones del término institución.[6][7]​ Estas definiciones conllevan distintos niveles de formalidad y complejidad organizativa.[8][9]​ Las definiciones más amplias pueden incluir prácticas informales pero regularizadas, como los apretones de manos, mientras que las definiciones más restringidas sólo pueden incluir instituciones que estén muy formalizadas (por ejemplo, que tengan leyes específicas, normas y estructuras organizativas complejas).

Según Wolfgang Streeck y Kathleen Thelen, las instituciones son, en el sentido más general, «bloques de construcción del orden social: representan expectativas sancionadas socialmente, es decir, impuestas colectivamente con respecto al comportamiento de categorías específicas de actores o a la realización de ciertas actividades. Normalmente, implican derechos y obligaciones mutuamente relacionados para los actores.«[9]​ Los sociólogos y antropólogos tienen definiciones amplias de las instituciones que incluyen las instituciones informales. Los politólogos han definido a veces las instituciones de manera más formal, en las que terceras partes deben hacer cumplir de manera fiable y predecible las normas que rigen las transacciones de la primera y la segunda parte.[9]

Una destacada definición Institucionalista de elección racional de las instituciones es la proporcionada por Jack Knight, quien define las instituciones como algo que implica «un conjunto de reglas que estructuran las interacciones sociales de formas particulares» y que «el conocimiento de estas reglas debe ser compartido por los miembros de la comunidad o sociedad relevante. «[10]​ Las definiciones de Knight y Randall Calvert excluyen las idiosincrasias y convenciones puramente privadas.[10][8]

Douglass North sostiene que las instituciones son «restricciones ideadas por los seres humanos que dan forma a la interacción».[11]​ Según North, son determinantes críticos del rendimiento económico, ya que tienen profundos efectos sobre los costes de intercambio y producción. Subraya que pequeños rasgos históricos y culturales pueden cambiar drásticamente la naturaleza de una institución.[11]Daron Acemoglu, Simon Johnson, y James A. Robinson coinciden con el análisis presentado por North. Escriben que las instituciones desempeñan un papel crucial en la trayectoria del crecimiento económico porque las instituciones económicas configuran las oportunidades y las limitaciones de la inversión.[12]​ Los incentivos económicos también influyen en el comportamiento político, ya que ciertos grupos reciben más ventajas de los resultados económicos que otros, lo que les permite hacerse con el control político.[12]​ Otro artículo de Acemoglu, Robinson y Francisco A. Gallego detalla las relaciones entre instituciones, capital humano y desarrollo económico. Sostienen que las instituciones establecen un terreno de juego equitativo para la competencia, lo que convierte a la fortaleza institucional en un factor clave del crecimiento económico. [13]​ Los autores Steven Levitsky y María Victoria Murillo afirman que la fortaleza institucional depende de dos factores: la estabilidad y el cumplimiento. [14]​ Una institución inestable y no reforzada es aquella en la que se ignoran las normas débiles y los actores no pueden crear expectativas basadas en su comportamiento. En una institución débil, los actores no pueden depender unos de otros para actuar de acuerdo con las normas, lo que crea barreras para la acción colectiva y la colaboración.

Características generales

[editar]

Las instituciones son sistemas de índole social y cooperativa creadas bajo imposiciones legales, que procuran ordenar y normalizar el comportamiento de un grupo de individuos (que puede ser de toda una sociedad). Las instituciones trascienden las voluntades individuales, al identificarse con la imposición de un propósito considerado como un bien social, es decir, que vendría siendo algo "normal" para ese grupo. Su mecanismo de funcionamiento varía ampliamente en cada caso, aunque se destaca la elaboración de numerosas reglas o normas que suelen ser poco flexibles y amoldables.[15]

Muchas instituciones son organizaciones formalmente establecidas, aunque otras no; ni siquiera tienen por qué corresponderse con un lugar físico, extendiéndose a una conducta y costumbres consideradas importantes para una sociedad, como las particulares organizaciones formales de gobierno y servicio público, o incluso a hechos sociales contingentes (como el conducir un automóvil por la derecha en unos países y por la izquierda en otros), o al aprecio que se siente por una persona digna, respeto y consideración (tal o cual artista o personaje popular es considerado una institución).

Las instituciones, como los seres humanos, han ido evolucionando a través del tiempo, lo cual ha permitido generar un orden y una estabilidad social, en donde cada miembro del grupo debe apegarse a ciertas normas y reglas, dando origen a la división del trabajo y a la organización de tareas y de roles; pero para que las instituciones se conformen deben reunir ciertas características como se menciona en el artículo de Power, Van Schaik y Lehmann, «La formación de las instituciones requiere intencionalidad compartida, el lenguaje y otras habilidades cognitivas en gran medida ausentes en otros primates», publicado en Philosophical Transactions of the Royal Society B en 2016.[16]​ Es decir, que las instituciones actuales provendrían históricamente de sus estados previos, pudiendo conservar algunas características primigenias, en cuyo caso sería un fenómeno camino-dependiente.[17]

Douglas North menciona que las instituciones son las limitaciones ideadas porque estructuran la interacción política, económica y social. Se componen de dos restricciones informales por ejemplo, los tabúes, costumbres, tradiciones, etc. y las limitaciones formales por ejemplo, las leyes de derechos de propiedad. Las finalidades de las instituciones serían: 1) Crear orden y reducir la incertidumbre, y 2) Proporcionar la estructura de incentivos en una economía de costos de transacción son un elemento crítico de los resultados económicos, y las instituciones -junto con la eficacia de la aplicación y la tecnología- determinan los costos de transacción. Cada desarrollo económico consiste en aumentar la especialización, la división del trabajo y la tecnología de forma continua más productivo.[18]

Como estructuras y mecanismos de orden social, las instituciones son uno de los principales objetos de estudio en las ciencias sociales, como la antropología, la sociología, la ciencia política, la economía y la administración de empresas entre otras. Las instituciones son también un tema de estudio central para el derecho, el régimen formal para la elaboración e implantación de reglas.

Etimología

[editar]

El término "institución", del latín institutio, de in, que implica penetración; statuere, estacionar, colocar, y el sufijo -ción, que implica acción o efecto,[19]​ comparte raíz etimológica con instituto, instrucción, instructor e institutriz.

Instituciones legislativas

[editar]

También llamadas instituciones mecanismos; consisten en componentes ideales de una entidad, como por ejemplo un Reglamento, Código, o una Constitución. Todas ellas, con el carácter de permanentes, pues, siguen existiendo a pesar de que algunas o todas las voluntades creadoras de estas entidades hayan fallecido.

Instituciones jurídicas

[editar]

Institutiones o Institutas son un conjunto de libros destinados a la enseñanza introductoria del Derecho romano.

Según el profesor Mario Verdugo ,[cita requerida] las instituciones son creaciones del obrar humano colectivo que, con carácter de permanencia, procuran satisfacer necesidades sociales éticas. Dentro de estas encontramos las instituciones jurídicas que son creadas en el mundo del derecho bajo normas coactivas y buscan un ideal de justicia.

Al lado de las normas jurídicas aparecen las Instituciones que, según Díez Picazo y Gullón,[cita requerida] son comportamientos que el Derecho regula, y que son básicas para que la convivencia se desenvuelva de acuerdo con unos determinados moldes de vida. A estos comportamientos, que son básicos para el desarrollo de la convivencia, se los denomina Instituciones, por ejemplo: el matrimonio, la familia, el contrato, la propiedad.

Otro sector de la doctrina[cita requerida], considera que las relaciones jurídicas presentan, a veces, grandes analogías por referirse a una misma materia (usufructuario y nudo propietario, acreedor y deudor, tutor y pupilo,etc). La doctrina considera así, que el conjunto de normas jurídicas referentes a una clase determinada de relaciones jurídicas constituyen la denominada Institución jurídica. Desde el punto de vista de la exposición científica de un conjunto normativo, el concepto de institución, así entendido, tiene gran valor sistemático, pues permite la ordenación de las materias afines formando las "Instituciones" de ese sistema jurídico.

José María Ots Capdequí fue un catedrático español especializado en Derecho Indiano y, en especial, en las Instituciones Jurídicas de las colonias españolas en el nuevo Mundo, con obras entre las que pueden señalarse:

El jurista Federico de Castro y Bravo, [cita requerida] se apoya en la significación idiomática como algo que alcanza la firmeza de lo fundamental y considera como Institución jurídica las formas básicas.

El jurista, historiador y catedrático de derecho internacional y humanitario en varias universidades europeas y americanas, Fernando Murillo Rubiera, incluye en su obra América y la dignidad del hombre una lista de obras sobre las instituciones de derecho público españolas en América que son fundamentales para la fundamentación teórica y práctica del institucionalismo y de las instituciones en Hispanoamérica ([20]​).

Instituciones políticas

[editar]

Serían aquellas que se refieren a la sociedad política, y que regulan la estructura y órganos del gobierno del Estado. Según el criterio presentado por la Unesco en 1948, referente a los puntos de vista de los demás objetos de estudio de la ciencia política, las instituciones políticas tienen relación con los siguientes conceptos:

Instituciones económicas

[editar]

Es un concepto de la ciencia económica, definido por la escuela denominada justamente institucionalismo económico y tal como la entiende esta teoría (una versión elaborada desde el liberalismo), como la forma en que se relacionan las personas en su tendencia natural a, mediante la búsqueda del mero interés individual, obtener como consecuencia el mayor beneficio para el grupo social.

Instituciones económicas serían las normas, usos y costumbres que rigen las relaciones sociales y económicas entre los miembros del grupo[21]​. El beneficio de una institución aumenta con la eficiencia que ésta genera en la economía y con la reducción de sus costes de transacción y de costes de información; lo que estará en relación directa con la experiencia que acumulen los agentes económicos y con la transparencia y sencillez de las reglas del sistema; y en relación inversa con el número de individuos que las ejecutan.

Instituciones científicas

[editar]

Instituciones científicas o de investigación son las instituciones dedicadas a la ciencia y la investigación científica. Están muy vinculadas a las instituciones educativas y a los ámbitos político y económico. Aunque es habitual identificarlas con las ciencias físico-naturales, desde su origen también están ligadas a las ciencias sociales o humanas. Para algunas de ellas, o en ciertos contextos, se utilizan expresiones tales como infraestructuras científicas o instalaciones científicas.

Historia de las instituciones

[editar]

La Historia de las Instituciones es la especialidad historiográfica cuyo objeto son las instituciones. Especialmente son objeto de esta especialidad las instituciones políticas, que de hecho permiten periodizar la historia. La principal de todas, el Estado (véase: historia política), puede verse desde sus orígenes con la polis clásica, la monarquía helenística, el Imperio romano, los Reinos Germánicos, la monarquía feudal, la monarquía autoritaria, la monarquía absoluta, el Estado Liberal, el Estado Social. También son objeto de la disciplina el resto de las instituciones políticas, locales (ayuntamientos), judiciales, legislativas. Las instituciones de otro tipo, más propiamente serían el objeto de la historia económica y social: las instituciones sociales (el matrimonio, la familia...), las instituciones económicas (por ejemplo la banca, la empresa...), siendo la mayor parte de ellas mixtas (el feudo, el señorío, el mayorazgo, la propiedad, la escuela, el ejército...). En particular, serían objeto de la historia eclesiástica las instituciones religiosas (la misma Iglesia, el clero y cada una de sus secciones, monasterios, catedrales, parroquias...). Al ser las instituciones grandes productoras de documentación, su historia se justifica fácilmente por la disponibilidad de materia prima para su estudio.

El institucionalismo en historia (no confundir con la tendencia homónima en economía) es una escuela historiográfica opuesta al materialismo histórico, al poner el protagonismo de la historia en las instituciones, mientras este lo hace en las clases sociales; también se opondría al providencialismo o a una interpretación individualista de la historia (véase sujeto histórico). Entre los historiadores que en España se han dedicado a la historia de las instituciones destaca Luis García de Valdeavellano.

Véase también

[editar]

Referencias

[editar]
  1. DRAE
  2. North, Douglass C. (1991). «Institutions». Journal of Economic Perspectives (en inglés) 5 (1): 97-112. ISSN 0895-3309. doi:10.1257/jep.5.1.97. 
  3. Error en la cita: Etiqueta <ref> no válida; no se ha definido el contenido de las referencias llamadas :4
  4. Caporaso, James A.; Jupille, Joseph, eds. (2022), «Introduction: Theories of Institutions», Theories of Institutions (Cambridge University Press): 1-15, ISBN 978-0-521-87929-3, doi:10.1017/9781139034142.001 .
  5. «Social Institutions». Stanford Encyclopedia of Philosophy. Metaphysics Research Lab, Stanford University. 2014. Consultado el 30 de enero de 2015. 
  6. Caporaso, James A.; Jupille, Joseph, eds. (2022), «Definiciones de las instituciones», Teorías de las instituciones (Cambridge University Press): 159-164, ISBN 978-0-521-87929-3, S2CID 245805736, doi:10.1017/9781139034142.007 .
  7. Hillmann, Henning (2013). «Las instituciones económicas y el Estado: Insights from Economic History». Annual Review of Sociology 39 (1): 251-273. ISSN 0360-0572. doi:10.1146/annurev-soc-071811-145436. «hay poco consenso sobre qué se entiende exactamente por institución. Aun así, la mayoría de los científicos sociales parecen mantener la postura de que reconocerían una institución cada vez que la vieran.» 
  8. a b Calvert, Randall (1995). net/publication/247334096 «Actores racionales, equilibrio e instituciones sociales». Explaining Social Institutions: 58-60. 
  9. a b c Streeck, Wolfgang; Thelen, Kathleen Ann (2005). id=s16hvDNAytQC Beyond Continuity: Institutional Change in Advanced Political Economies (en inglés). Oxford University Press. pp. 9-11. ISBN 978-0-19-928046-9. 
  10. a b Knight, Jack (1992). Institutions and social conflict. Cambridge University Press. pp. 1-3. ISBN 978-0-511-52817-0. OCLC 1127523562. 
  11. a b North, Douglass (1990). Institutions, Institutional Change, and Economic Performance. Cambridge University Press. 
  12. a b Acemoglu, Daron; Johnson, Simon; Robinson, James (2005). «Las instituciones como causa fundamental del crecimiento a largo plazo». Handbook of Economic Growth 1: 385-472. 
  13. Acemoglu, Daron; Gallego, Francisco; Robinson, James (2014). annualreviews.org/doi/abs/10.1146/annurev-economics-080213-041119 «Instituciones, capital humano y desarrollo». Annual Review of Economics. 6:875-912: 875-912. hdl:1721.1/95986. 
  14. Levitsky, Steven; Murillo, María Victoria (2009). «Variación de la fortaleza institucional». Annual Review of Political Science 12: 115-133. 
  15. Haidar, J. I., 2012. «Impact of Business Regulatory Reforms on Economic Growth.» Journal of the Japanese and International Economies, Elsevier, vol. 26(3), pages 285-307, September
  16. Simon T. Powers, Carel P. van Schaik, Laurent Lehmann. «How institutions shaped the last major evolutionary transition to large-scale human societies». Phil. Trans. R. Soc. B (en inglés). The Royal Society Publishing. Consultado el 7 de marzo de 2016. 
  17. Fleta-Asín, Jorge; Muñoz-Sánchez, Fernando; Gimeno-Feliú, José María (26 de septiembre de 2022). «Does the past matter? Unravelling the temporal interdependencies of institutions in the success of public–private partnerships». Public Management Review 0 (0): 1-27. ISSN 1471-9037. doi:10.1080/14719037.2022.2125558. Consultado el 23 de abril de 2023. 
  18. Douglass C. North. «Institutions». The Journal of Economic Perspectives (en inglés). Consultado el 7 de marzo de 2016. 
  19. Etimología de institución en etimologias.dechile.net (Consultado jueves 15 de febrero del 2018)
  20. Fernando Murillo Rubiera. América y la dignidad del hombre. Los Derechos del Hombre en la Filosofía de la Historia de América. Madrid: Editorial MAPFRE, 1992.
  21. Fleta-Asín, J; Muñoz, F. (12-01-2023). «Institutional distance and US-based international mutual funds’ financial performance». Finance Research Letters. doi:10.1016/j.frl.2022.103412. Consultado el 05-02-2024. 

Enlaces externos

[editar]