Tóner , la enciclopedia libre

Un cartucho de tóner de color magenta.

El tóner (del inglés toner), también denominado tinta seca por analogía funcional con la tinta, es un polvo fino, normalmente de color negro, que se deposita en el papel que se pretende imprimir por medio de atracción electrostática o magnetografía. Una vez adherido el pigmento, este se fija en el papel, por medio de presión y calor adecuado.[1]

Debido a que en el proceso no intervienen diluyentes, originalmente se le ha denominado xerografía, del griego «xeros» que significa «seco» o escritura en seco.

Partes de un toner Las partes de un tóner son las siguientes:[1]

Cuchilla dosificadora o doctor blade:

Esta cuchilla es la pieza Encargada de regular la cantidades de tóner del cartucho que pasa del depósito de tóner al cilindro imantado.

Además de ser una pieza que se desgasta con el tiempo, es uno de los elementos que genera las rayas diminutas que se observan en la impresión.

Depósito o suministro de tóner:

Es el espacio donde se alberga el tóner que impregna por magnetismo y fija en el papel por la acción del láser.

Cuchilla limpiadora:

Retira el tóner que no ha quedado adherido al papel y lo manda al depósito de tóner de desecho. Esta cuchilla es la que produce mayor desgaste en el cilindro; su instalación requiere de un ajuste muy preciso. Si no se coloca adecuadamente, las hojas podrían salir sucias, por el contrario, si está demasiado ajustada, puede dañar el cilindro antes de tiempo.

Chips en el toner:

Contienen una memoria que le provee identificación dentro de la impresora y tienen una memoria que permite contar el número de impresiones, por lo que permiten verificar el rendimiento del toner, número de páginas impresas y los minutos de trabajo. También inutilizan el toner después de su uso e impiden su reciclaje directo, por lo que funcionan como una forma de obsolescencia programada.

Depósito del tóner desperdiciado:

Este recipiente es más pequeño que el del tóner, y su función es recoger el tóner sobrante después de realizada la impresión, ya que este tóner no puede reutilizarse. En ocasiones, este depósito puede ir separado (generalmente viene incluido en empaque de la impresora). Si se recicla, es importante vaciar este depósito, ya que si está lleno y no realiza su función pueden salir las copias siguientes manchadas. Algunas impresoras poseen sistemas de detección de llenado de este recipiente, e impiden seguir imprimiendo hasta que este no sea vaciado o sustituido.

Rodillo de carga primaria o PCR:

La función de este rodillo es aplicar una electricidad con carga negativa a la superficie del cilindro OPC para que el láser pueda escribir sobre este. Suele estar hecho con un eje de metal y una cubierta de goma modelada.

Cilindro imantado o mag roller:

También comúnmente llamado rodillo de alimentación. Es un tubo o cilindro recubierto normalmente de teflón, este se encarga de transferir el tóner del depósito al papel.

Unidad de cilindro OPC (fotoconductor orgánico u Organic Photo Conductor):

Es el elemento sobre el que actúa el láser. Suele ser de aluminio, recubierto en sus primeras épocas con compuestos de selenio y en la actualidad de un material orgánico con propiedades fotoconductoras. Se carga de forma negativa con el rodillo magnético, luego el láser crea el dibujo sobre él ("borra" con luz las partes no impresas quitando el tóner innecesario) e impregna el polvo en la hoja o en el cilindro de transferencia.

Esta pieza se puede separar en tres capas esenciales:

  • La capa de ULC (Undercoat Layer) capa de imprimación.
  • La capa de CGL (Charge Generation Layer) capa de generación de carga.
  • La capa CTL (Charge Transport Layer) capa de transporte de carga.

'''diferencias entre el tóner y los cartuchos de tinta'''

La principal diferencia entre el tóner y un cartucho de tinta es que la tinta se usa en impresoras de inyección de tinta y el tóner se utiliza en impresoras láser. Mientras que el cartucho de tinta es líquido, el tóner está en formato polvo. Si bien los cartuchos de tinta y los tóneres tienen la misma función, son completamente diferentes.

Qué es un cartucho de tinta?

El cartucho es un consumible de recambio que incluye un depósito con tinta líquida. Dependiendo del modelo, se ajusta a los inyectores de la impresora o incorpora unas boquillas propias en su diseño.


Por lo general, los cartuchos de tinta imprimen con tecnología de inyección térmica, aunque hay equipos -como los Epson- que se decantan por la inyección de burbuja o piezoeléctrica.

Precios de los cartuchos de tinta

El precio de los cartuchos de tinta no está escrito en piedra. ¿Qué quiere decir esto? Que dependerá de muchos factores, entre ellos, la marca y el rendimiento. La calidad de la tinta también podría influir en el precio.

Los cartuchos de tinta OEM -es decir, de marca- son los más costosos del mercado. ¿Ventaja? Fueron diseñados por el fabricante de la impresora, por lo que no deberían arrojar errores. ¿Desventaja? El precio podría superar hasta en 10 veces a otras opciones del mercado.

Los cartuchos de tinta remanufacturados son consumibles de marca vacíos. En este caso, su depósito se rellena con tinta de otro fabricante. ¿Ventaja? Pueden usarse 2-3 veces y tienen un coste asequible. ¿Desventaja? La tinta de terceros no suele emular la delicada fórmula de pigmentos de la marca.

Los cartuchos de tinta compatibles son los más económicos (y los de mayor calidad). De hecho, se acercan bastante a los consumibles OEM. ¿Ventaja? Buena calidad a precios irresistibles. ¿Desventaja? No todos cuentan con el sello ISO 9001.

Rendimiento de los cartuchos de tinta

La duración de un cartucho de tinta depende 1) del fabricante y 2) del modelo de la impresora. Entonces, ¿cómo puedes saber cuál es la vida útil de ese consumible que tienes en la mira? Fácil: busca su rendimiento ISO/IEC. Esto te mostrará su cálculo aproximado de impresiones A4 al 5 % de cobertura.

Calidad de impresión de los cartuchos de tinta

Generalmente, los cartuchos de tinta tienen fama de crear colores asombrosos, profundidad, iluminación, sombras, contornos definidos, entre otros elementos. Por algo son los favoritos de los fotógrafos y diseñadores gráficos. Sin embargo, su calidad de impresión (resolución impresa) varía dependiendo del modelo de la impresora y de la fórmula de la tinta.

Si el equipo alcanza una resolución de 4800 x 2400 ppp y combina el uso de pigmentos con colorantes al agua -además de gotículas de varios tamaños y un gran número de inyectores- la calidad será insuperable.

Si se trata de un modelo doméstico de 600 x 600 ppp, es posible que la impresión se aleje de la calidad fotográfica.


Todo lo que debes saber sobre los tóner

¿Qué es un tóner?

El tóner trabaja con la impresión láser. Visualmente, es un consumible más grande que los cartuchos de tinta. A diferencia de sus «primos», el tóner trabaja con micropartículas de pigmento y no con colorantes al agua.

Para imprimir a altas velocidades, incorpora también pequeños pedazos de plástico que se derriten para unirse al pigmento y blindar a cada impresión con una protección extra.

Precios de los de tóner

La diferencia entre el precio de un tóner OIM y otro compatible es similar al caso de los cartuchos de tinta. Sin embargo -y en comparación con el pigmento líquido- los tóneres parecieran ser más costosos. ¿Realmente lo son? No. Su coste por página impresa, de hecho, suele ser menor.

Rendimiento de los de tóner

Durante la popularización de los cartuchos de tóner se usaron dos frases publicitarias que quedaron en la mente del usuario: trabajan a una velocidad mayor y ofrecen más páginas impresas.

No obstante, la tecnología de inyección de tinta ha avanzado mucho en los últimos años. HP, por ejemplo, cuenta con equipos que simulan la velocidad de una impresora láser. Epson ha diseñado tintas que secan casi al instante.

¿Es la regla? No. Por lo general, los tóneres rinden más que un cartucho de tinta.

Dato curioso. La media del rendimiento de un tóner se sitúa entre 3500-7500 impresiones ISO/IEC.

Calidad de impresión de los tóner

Los tóneres son perfectos para llevar a cabo grandes proyectos. Son rentables, no necesitan de un tiempo de secado y alcanzan una buena calidad de impresión. No obstante, los cartuchos de tinta son los reyes de la resolución impresa.

Toxicidad del tóner

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El tóner utilizado en impresoras láser y otra maquinaria puede contener diversas substancias tóxicas de alta peligrosidad, entre ellas benceno.[2]​ Otros tóxicos que contienen los tóneres son: etilbenceno, tolueno, 1,2-diclorobenceno,1,4-diclorobenceno, trimetilbenceno, estireno, o-xileno, tricloroetileno, acetona, acentofenona, acetato de butilo, butanol, 2-etil-1-hexanol, formaldehído, hexanal, dodecano, hexadecano y pentalmetilheptano.[3]

Muchos de los tóxicos señalados son carcinógenos. En concreto, el Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos (DHHS) ha determinado que el benceno es un reconocido carcinógeno en seres humanos y otros mamíferos lactantes. La exposición de larga duración a altos niveles de benceno en el aire puede producir leucemia,[4]​ así como cáncer de colon.

Véase también

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Enlaces externos

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Referencias

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